RADIO SOLAR

SEBASTIÁN HIDALGO

Saenger Galería tiene el gusto de presentar Radio solar, primera exhibición individual del artista mexicano Sebastián Hidalgo (Puebla, 1985) en la actual sede de la galería, en el histórico barrio de Tacubaya. Dicha muestra se compone de un conjunto de obras inéditas, entre pintura, dibujo y una pequeña instalación, realizadas durante los últimos años, de 2019 al presente; lapso que comprende la aparición de la pandemia por Covid-19 y sus consecuencias todavía vigentes, hechos que proveen de fondo al relato medular trazado en la exhibición de Hidalgo. 

El ejercicio de Sebastián Hidalgo gira en torno al dibujo y la pintura, esencialmente; o más exacto, alrededor de la pintura y el dibujo de carácter objetual, de ahí la presencia escultórica de su obra. A través de materiales sencillos y comunes como el óleo, el carboncillo, la tinta, el grafito, los lápices de color, el mármol, la madera, el algodón, el lino y el papel, Hidalgo desarrolla una obra en la cual explora tanto un conocimiento de orden sensible (asunto predilecto de las filosofías de Oriente) como un pensamiento visual (atributo destacado de la poesía y la mística). Véase Llave de mármol, una obra de 2019 compuesta por una pequeña repisa de madera y un fragmento regular de mármol que en el frente tiene dibujados diminutos puntos negros. Aunque casi imperceptible, el dibujo realizado por el artista semeja a primera vista la erosión natural de la piedra, con lo cual más que una intervención o alteración del objeto, su acto creativo deviene una integración al orden natural de las cosas. El sentido visual y sensorial es reforzado por la capa de polvo que se ha ido acumulando sobre la superficie del artefacto en su tránsito por el estudio del artista, primero, y en el espacio de exhibición ahora. En esta obra, como también sucede en el dibujo Criptovegetación (2021) o en la pintura que da nombre a la exposición, Radio solar (2021), no existe ningún recurso retórico, ni siquiera metafórico, sino una intención de correspondencia, de religar el potencial de asociación de los elementos que constituyen la obra y la dotan de una entidad en sí misma, si bien múltiple y hasta mutable.  

A la manera de un alto surtidor, en Radio solar Sebastián Hidalgo hace suyo aquel verso de Apollinaire, “oh sol, es el tiempo de la razón ardiente”, y nos entrega una obra minuciosa que, desde la elección de sus materiales y el empleo de éstos por medio de la acumulación de estratos de información material, sensorial, simbólica y visual, medita por igual sobre la existencia humana y la presencia del arte. Siguiendo al poeta francés, Hidalgo contempla (radialmente) las condiciones aún presentes de confinamiento y libertad condicional y, desde su experiencia a la orilla de la metrópoli, nos da cuenta de algunas noticias sobre “lo antiguo y lo nuevo”, “lo que un hombre solitario puede saber de esas cosas”; y al hacerlo, nos adentra (solarmente) en “extraños dominios / donde el misterio germina”. Atento del ruido y la desesperanza circundantes, y en contra del tedio y la banalidad acechantes, la obra de Sebastián Hidalgo nos recuerda que “hay tiempo para desterrar / y tiempo para el regreso”. 

Intuitivamente, la imagen de la invitación de Radio solar es un dibujo que se titula Adiós mundo; fechado en enero de 2020, prefigura un futuro que ahora es nuestro presente. El resto de la obra que conforma la exhibición de Sebastián Hidalgo tiene, en consecuencia, la intención implícita de ser testigo y testimonio de los cambios que han cimbrado al mundo desde entonces; un relato circular, radial y solar, de los hechos que todavía acontecen. En ese fugaz gesto (la mano en alto, a un costado del rostro que mira con sorpresa), el personaje de Adiós mundo cifra al mismo tiempo un saludo de despedida y otro de bienvenida: una señal, rojo incandescente, que nos remite a la destrucción y la regeneración.

— Christian Barragán